Somos parte de un proceso social que desde 2005 se ha venido dedicando al acompañamiento formativo de organizaciones sociales del Magdalena Medio colombiano. Actualmente también nos dedicamos a la investigación académica y práctica de los movimientos sociales y la educación popular; el fortalecimiento de la cultura y la construcción de paz por medio de la pedagogía en los territorios de la región del nordeste antioqueño, sur de Bolívar y el municipio de Barrancabermeja.
Sobre Nosotras y Nosotros
"LA EDUCACIÓN NO CAMBIA AL MUNDO: CAMBIA A LAS PERSONAS QUE VAN A CAMBIAR EL MUNDO" Paulo Freire
Hablar de educación superior es
hablar de luchas estudiantiles, especialmente como referente de transformación
social, no solo en Colombia sino en toda
América Latina.
Los cuatro textos y dos videos
que se comparten en este módulo de acercamiento al tema de la Educación
Superior, llegan a la Escuela de Formación Popular Sandra Rondón Pinto para ser
compartidos con jóvenes hombres y mujeres de colegio, universidad, barrio o a quienes les interese algún tipo de
acercamiento a las ideas de la reforma
universitaria iniciada en la Argentina a
inicio del siglo pasado y que influenció a toda Latinoamérica; la perspectiva
del gobierno de Juan Manuel Santos sobre lo que debe ser una ‘revolución
educativa’ en Colombia; pasando también por una explicación de lo que es y
representa el gobierno y la gobernabilidad en las instituciones de educación
superior públicas; hasta llegar a un análisis sobre el desarrollo de la educación
superior en el país. En la CAJA DE DOCUMENTOS de nuestro blog y al final de esta publicación se puede tener acceso a la guía del módulo, en el cual se encuentran los enlaces para descargar documentos y poder ver el material audiovisual que se recomienda.
A Huber Ballesteros lo encerraron
en una cárcel por haber sido líder campesino en el Paro Nacional Agrario del 2013. En aquél entonces, miles de personas salimos
a las calles de nuestro país para decirle no al abandono sistemático del campo
colombiano. Familias, ciudadanos y ciudadanas del común, el movimiento popular,
el movimiento estudiantil, incluido el movimiento indígena por supuesto, se
sumaron a la legítima protesta en apoyo
a las reclamaciones de los campesinos y campesinas de Colombia.
Hoy queremos celebrar con mucha
alegría el regreso a la libertad de Huber Ballesteros, especialmente por el
martirio que actualmente tienen que vivir los presos políticos y de conciencia
en las cárceles. De alguna manera también es un llamado a las autoridades por
mejorar las condiciones de vida en los centros carcelarios del país, pues no
solo los presos políticos sino también condenados por otros delitos, viven las
duras condiciones de un sistema deshumanizado en todo el sentido de la palabra.
Para enero de 2016 las cárceles de
Colombia a cargo del Instituto Nacional Penitenciario de Colombia – INPEC mantenía
una población carcelaria y penitenciaria de 120.736 personas a su cargo,
contando con capacidad de reclusión para 77.953 personas, es decir, funciona con una
sobrepoblación carcelaria de 42.783 personas, un 54% de hacinamiento. De esas
120.736, aproximadamente 9000 son prisioneras y prisioneros políticos[2].
Como en cualquier campo donde se
comete la injusticia, queremos
solidarizarnos con los miles de presos políticos y de conciencia que aun hoy se
encuentran injustamente en las cárceles. A los que les hicieron un montaje
judicial para inculparlos de un delito que jamás cometieron, a los que están
encerrados mientras dilatan sus procesos para que pasen mínimo un año en
prisión mientras el caso se archiva, porque definitivamente no les pueden inculpar
algún delito, a todas las victimas del sistema de represión estatal; para
ustedes mujeres y hombres que han trabajado por sus comunidades, por sus
barrios, por las personas de sus pueblos a quienes les han violentado sus
derechos, a ustedes que por pensar, actuar y decir diferente pero no por ello poco
consecuente, queremos enviarles un fraternal y solidario abrazo de fortaleza y
esperanza.
PAZ ES LA VIDA DIGNA EN EL CAMPO
Y LA CIUDAD;
PAZ ES PODER DECIR LO QUE SE
PIENSA SIN QUE ESTO TENGA COMO CONSECUENCIA LA CÁRCEL O LA MUERTE;
PAZ ES PODER SOLUCIONAR NUESTROS
PROBLEMAS SIN VIOLENCIA DE POR MEDIO;
PAZ ES LA LIBERTAD DE TODAS Y
TODOS LOS PRESOS POLÍTICOS Y DE CONCIENCIA EN NUESTRA COLOMBIA.
Enlaces relacionados:
Video: ‘Cárcel al pensamiento
crítico’ – Voces de Barrio: